martes, 22 de marzo de 2011

Comentarios chiquitos de viaje

Estoy en Gualeguaychu tirada. Descubrí que me gusta más el río que el mar, porque el río se presta mucho más para que una se meta. Voy a alquilar una canoa mañana ¿tengo que esperar a Candela para tomar la leche? ¿Qué vamos a hacer con el río de noche?

Apenas vaya al centro tengo que ir al registro civil de esta ciudad a buscar los datos "reales" del nacimiento de mi bisabuela Sixta Díaz (1900 aprox.). Era aborigen y como se deduce bastante pobre. Sus padres: José Díaz y Margarita Miranda.

Acá todo es muy verde. Me sorprende como convertimos todo en paisaje.


Hay fiesta en el camping. Una especie de cuadrado del que se desprenden chorros de agua que deben mojar a la gente cuando baila. Esto se hace todos los días pero hasta las ocho, nos dice el viejo que controla que no metan cosas de vidrio a la fiesta.
Hoy es martes y son las siete y diez. Ya pusieron el reggaetón "mamita te voy a cazar" pero la gente no se prende. Están todos como idos, tomando mate, atraídos por el poder sobrenatural de este río. Escucho "cuando te agarre un remolino de río te vas con él".

Lo más importante del día fue que anduvimos en kayak. En realidad yo quería un bote, pero no conseguimos, después me pareció mejor la piragua (que es un bote largo). Lo probamos unos metros y chocamos contra un muelle. A todo esto Candela insistía con el tema de que quería un kayak, decía que sabía un montón sobre kayaks y que se yo. A mí los kayaks me dan inseguridad porque se dan vuelta fácilmente.

Volvimos por un kayak rojo y nos fue bastante bien aunque chocamos contra varias cosas, entre ellas, un yate encallado, unas personas, y una cosa muerta que no supe adivinar que era porque tenía alas y piel atigrada.

A cada persona Candela le preguntaba: "¿tenés fay?", es decir porro. Volvimos al camping, porque Candela -que tanto había insistido con el kayak- se cansó rápido. Como excusa dijo "se me van a salir los brazos de tanto remar".

En el camping se había armado una fiesta tipo cumple 15. Incluía: animador carismático brasilero y cinco parejas elegidas entre el público que tenían que bailar en un escenario precario. El público estaba en pedo.

Me puse de mal humor y Candela otra vez volvía a insistir, esta vez para que baile. A mí personalmente me da vergüenza bailar en público cuando no estoy en "estado".
Me tiré al río, pero la gente estaba tomando dentro del río y me pareció sucio, así que me fui a la carpa a comer papa fritas.

Nos bañamos. Tenemos mucha música alrededor, nada de bandas viejas ni rock setentoso, tampoco música cheta actual (mgmt). Todo acá es comunitario y popular. Los reyes del camping son: los redondos, no te va a gustar, reggae nacional, y meta guacha. Ahora mismo Candela hace sociales para poder cocinar en el fuego de alguien (así nos ahorramos la tarea de prenderlo nosotras). Mi tarea es lavar y cortar la lechuga y el tomate, poner la mesa.

Hoy me levanté y fui rápido a la playa. El calor en la carpa era insoportable. Me metí al río y no había nadie. Reservé sombrilla de playa, después se llenó. La gente acá toma alcohol de sol a sol. Leímos todo el santo día.


Hoy a las seis de la tarde me tomé al Catamarán "el entrerriano". Todo es muy verde. Los entrerrianos son muy celosos de su provincia, creo que piensan que son algo aparte: "antes de argentinos, somos entrerrianos" dijo el guía. Todos trabajadores y muy ambientalistas, me parece genial.

No lo quieren nada a Urquiza pero sí al caudillo de la zona que es Ramírez. Por la mujer de Ramírez todas las chicas acá se llaman Delfina.

Los entrerrianos también llamados "panzas verdes" son unas personas muy conservadoras. Un gordito en el catamarán me preguntó: "¿cuál es tu Facebook? El mío es Diego Miranda".

¡Igual que mi tatarabuela!

Hoy jueves nos pusimos en estado y bailamos toda la tarde. Había que seguir los pasos del animador brasilero y creo que fallé. Mis movimientos no concordaban con los de las otras chicas. Al final me resigné e hice lo primero que se me venía a la cabeza. Estaba lleno de gente súper excitada. Candela me dijo en un momento que estaba en un recital de los redonditos de ricota, después la perdí. Terminé sin ojotas en un bosquecito.

jueves, 17 de marzo de 2011

chat

to dice:
no le hagas caso
no pelies con andie
nadie
pizza 22 dice:
le dije vos no le ganás a nadie en nada
to dice:
bueno
no jodas
no pelies al pedo
que dijimos hoy
no tenes que peliar
pizza 22 dice:
ya se
no voy a peliar
to dice:
bueno
cortala
pizza 22 dice:
bastaç
las bombas caseras en mi barrio eran moneda corriente. los chicos esperaban a la madrugada para tirarlas en las garitas de colectivo. un día la municipalidad inauguró una garita de colectivo mal hecha, se pasaba el agua, no servía, y los chicos agarraron martillos y la tiraron abajo. uno iba caminando con el martillo en la mano, vino la policía y le preguntó por qué tenía eso, él respondió que lo tenía porque estaba arreglando unas cosas ¿a las tres de la mañana? lo agarraron a palos y se lo llevaron.
to dice:
jaja
está bueno
pizza 22 dice:
sos un putito
y te voy a dar
te voy a dar hondureño
to dice:
no te metas conmigo
tengo muchos contactos
pizza 22 dice:
ah si?
yo también
y de alto rango
militares checoslovacos
to dice:
conozco villeros
re cabezas, que n tienen nada que erder

to te ha enviado un zumbido.