lunes, 15 de diciembre de 2008


Diario de Elenita ¿Quién se comió todo el helado?


Guitarras y armónicas en el pasto. El chico que quiso ser perro.



Espesa niebla de blancas aves rapaces que una a una, picoteando en su mente van pellizcan de ella historias de nubes antiguas visiones del campo.
Carca



Ya no estoy locamente enamorada, empecé a hacerme creer que esa instancia no era posible en relación a los muchachos.

Los días de cobro transcurren pasivos y hasta candidos, algún asado en fin. Los días de fin de mes, invade un viento terrible, el de la pobreza y el de las privaciones, el de pedir fiado o pedir plata en algún lado. Es una rutina la economía, se vuelve predecible.

El me cuenta cosas y yo me pregunto ¿Por qué no me besas tonto? Porque no hace nada, habrá que darle un empujón, pero no tengo ganas tampoco. Sin embargo, no estoy enamorada de él, ya no. Pienso en el pasado y digo fue amor fue amor, pero ahora no. Me molesta de mí, que estoy fumando y bebiendo durante la semana, y me preocupa tener el riñón carcomido, los pulmones negros y la nariz roja de borracho.

Yo escribo lo que me gusta ¿no es suficiente? ¿Seré imbecil?


Mi método defensivo es ser irreverente, presumida, hedonista ¿no se dan cuenta? Es porque no me caigo bien, creo que la persona que peor me cae soy yo misma. Que sentimental, a veces pienso que no tengo nada nuevo para decir, pero hay que decir igual.


No es casual porque yo un día le dije que gustaba de él y parece que se la tomo en serio. Y vi una foto suya que me mando Gervasio, y parece un ratatuil. Ahora si, nada más.



Siempre tuya, Elenita.

1 comentario:

Mechi dijo...

carita de Ratatuil!
Me acordé de Nene, el tono por ahi.